Aquel día

Se durmieron las palabras en mi boca.
La dureza del silencio se impuso.
La soledad fría, me invadió loca.
Mi entorno tornase carnaval difuso.
 Cuantos sueños quedaron tirados! Cuantos anhelos de niño inconclusos!
Cuantos posibles, en el suelo quebrados!
Cuanto amor intenso del dolor recluso!
 Las palabras resuenan a lo lejos apagadas
Todo es una especie de espantos vivos
Una cruel broma del destino ante mí desplegada.
Un ácido en mi piel y alma, que resulta abrasivo!
Dejen que se vaya, no la quiero más, a la vida!
Si hoy con él, con mi hijo, mi esencia se ha ido!

CUÁNDO

Cuando quieras descansar aquí están mis brazos, 

tu duro y largo caminar, se diluirá en mi regazo. 

 Cuando quieras reír, hazlo donde quieras, 

en el viento la podré oír, rebotara en vidrieras. 

 Cuando algo te haga llorar, 

lloraré contigo con afán, 

te ayudaré a el dolor borrar, 

y lo esconderemos en el desván. 

 No quise mi sol, ni quiero 

que sientas soledad, hastío. 

Por ti mi lucero yo muero,

ahora sin tí... eterno vacìo.

AMOR SIN Destino

Semillas de amor desperdigadas en vano,
en terrenos congelados o páramos sombríos!
Flores de amor que no cupieron en mis manos.
Sueños de amor que carecieron de bríos!

Más de un amor a lo largo y ancho del sendero.
Cada vez más, fueron fuegos de pasión, artificios.
El poeta cantó al amor desgarrado en desespero.
Mis amores se escurrieron entre oscuros orificios.

No quise amar para no sufrir el abandono frío.
Solo supe querer y encender las dulces pieles,
tremolar entre abrazos, suspiros y escalofríos.
De cada uno saborear las gotas de dulces mieles.

De intensas pasiones fui hábil y aplicada hilandera.
Noches largas de orgasmos infinitos, cálida amante.
Y sin embargo hubo un ser especial, mi gran quimera,
mi hombre, mi amor, mi sol, que solo duró un instante.

Pertenecer

Ay! que falta me hace pertenecer.
Esa exquisita sensación de importar.
Ese saber que hay un lazo de ser.
Ese impulso vital que es estar.

Estar latiendo en el sanguíneo torrente
y sentir en tus venas el lazo invisible.
Mirarte al espejo de esa alma refulgente.
Sentirte parte del todo, ser indivisible!

Hoy, átomo suelto y perdido del ayer,
vaga mi existir sin más seña de vivir
que el respirar, y vibrante parecer,
cuando por dentro es un sin fin morir.

A VECES

A veces te recuerdo vívido ayer! 

A veces pienso que fuiste un sueño que se perdió entre las brumas del tiempo transcurrido. 

Tú existencia mía! Días de infancia, días de adolescencia, días de adulto joven, días de aparente madurez y días de larga edad, que está indefinida en mi mente pero, que el calendario dice que son muchos!

Los gloriosos días de maternidad, tú depredadora existencia mía me los robaste sin consciencia. 

Aunque son mi tesoro secreto al que no podrás jamás acceder. 

A veces me pregunto ¿esto es haber vivido?...porque ante eso me declaro ignorante del concepto vida! Tú existencia mía eres hoy un archipiélago donde fenecen los recuerdos y una islita en la que intento practicar la supervivencia! 

Me aferro al árbol de la amistad, hermoso y frondoso refugio! 

Pero allí y allá amenazan los baobabs de las decepciones, de las traiciones, de los fraudes de pseudo seres humanos! 

A veces te quiero borrar, pero escrita con tinta indeleble tú sales una y otra vez, apareces en las hojas del libro borroneado de mi historia.

Locura viajera

Treparé, en equilibrio por un cordón de plata
que amorosa me lanza la reina de la noche,
iré con mi mis sueños en caja escarlata,
para hacer con las estrellas de alegría derroche.
Salvas de júbilo vendrán de una supernova,
iridiscentes trozos bailarán con los asteroides,
sentada en un volcán quizás escriba una trova,
que cuente una historia digna del celuloide!
Más a los que están abajo no les interesa,
una loca viajera y sus sueños nocturnales,
están tan apegados a sus vidas que estresan,
no hay tiempo para fantasías insurreccionales!
Cual artesana tejo mis sueños en el infinito,
con polvo de estrellas adorno lo diverso,
prendo farolas para que todo luzca bonito,
a cada viajero loco del espacio inverso.