Ay! que falta me hace pertenecer.
Esa exquisita sensación de importar.
Ese saber que hay un lazo de ser.
Ese impulso vital que es estar.
Estar latiendo en el sanguíneo torrente
y sentir en tus venas el lazo invisible.
Mirarte al espejo de esa alma refulgente.
Sentirte parte del todo, ser indivisible!
Hoy, átomo suelto y perdido del ayer,
vaga mi existir sin más seña de vivir
que el respirar, y vibrante parecer,
cuando por dentro es un sin fin morir.
jueves, 9 de febrero de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario