Tengo en mis ojos tu silueta, ¡estampa amada!
Las caricias compartidas, tu risa, las bromas.
En mi pelo aún siento tus dedos que asoman.
Impresa en mi memoria la noche del encuentro.
Las velas rojas en la mesa, daban tenue luz.
Las copas de pie alto mecen burbujas dentro.
Bailamos, figuras fundidas ambos a contraluz.
Otro lugar, aburrimiento mortal me invade toda.
Música, risas, humo de cigarro, caras insulsas.
De pronto llega alguien que es de armonía oda!
Se imprime en mi ser, mis pasiones impulsa.
Y ese alguien, que de un leve toque deja trunca
la monotonía,
se empodera de mi mente, mi ser todo.
Sin saber cómo, estoy impresa, fundida en él como nunca.
Gente, humo, alcohol desaparecen, encontré mi nodo.
La noche se desvanece, lo dicen pálidos rayos filtrados,
rozan los cuerpos desnudos, impresos y agotados de sexo.
¿Cómo te llamas? Surge la pregunta, agitados, abrazados
Reímos cual niños pillados, pero está fuerte el impreso nexo.
Loca historia de nuestra relación que fue difícil, extraña!
Interrumpida por nuestros mutuos deslices emocionales
Por esos arranques de celos míos que dentro me arañaban!
Por tus escapadas de vicios diversos que eran augurales.
Y los rencuentros apasionados que roían nuestras entrañas.
Fueron la tónica de abismos de entregas casi accidentales!
Quedé en ti impresa
Quedaste en mí impreso
Los sexos impresos
Los dos impresos!!
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